Beneficios de una cuenta de ahorro para la vivienda

Actualmente existen varios tipos de cuentas de ahorro, como por ejemplo, cuentas de ahorro para la educación superior, cuentas de ahorro a la vista y las cuentas de ahorro para la vivienda, entre otras. Al elegir una de estas cuentas, es importante conocer la rentabilidad anual que ofrece el banco o institución financiera por mantener el dinero. La rentabilidad anual se refiere al interés que pagará esa entidad al beneficiario de la cuenta por mantener ese dinero, por lo que una buena cuenta de ahorro es aquella que ofrezca mayores intereses al beneficiario, así como también mayores servicios y que en lo posible no tenga costos de mantención.

Respecto a las cuentas de ahorro para la vivienda, es uno de los productos de ahorro más utilizados, ya que permite postular a los diferentes subsidios habitacionales ofrecidos por el Estado, así como también acreditar un respaldo ante las instituciones financieras al momento de solicitar un crédito hipotecario. Se trata de un método de ahorro personal y voluntario, y el monto que se ahorre mensualmente dependerá de la capacidad económica de cada persona.

Además, permiten disponer de los fondos cuando se requieran, siempre y cuando no se supere el límite de monto y giros establecidos, ya que de lo contrario se podrían perder los reajustes e intereses que generó el ahorro. Es importante señalar que en el caso de los subsidios habitaciones, se exige una cantidad mínima de ahorro habitacional previo para poder acceder a dicho beneficio y dependerá del programa habitacional que se elija.

En cuanto a los requisitos para abrir una cuenta de ahorro, son básicamente ser mayor de 18 años, no tener otra cuenta de ahorro para la vivienda y depositar un monto inicial al momento de la apertura de la cuenta, lo cual hace que sea accesible prácticamente a cualquier persona.

¿Es conveniente y cuáles son los beneficios de este tipo de cuenta para la vivienda?

Siempre será conveniente mantener una cuenta de ahorro para la vivienda, sobre todo para aquellas personas que no tengan una gran capacidad de ahorro o no tengan acceso a otros instrumentos financieros que otorguen mayores retornos de dinero. Además, el principal beneficio es que al tener una cuenta de ahorro para la vivienda, se puede acceder a los subsidios habitacionales otorgados por el Estado, y se generan también intereses anuales que ayudarán a incrementar el monto ahorrado.

Importante también en estos tiempos en dónde se está volviendo más difícil poder acceder a créditos hipotecarios, es el poder tener una mayor cantidad de ahorro para la compra de la vivienda, ya que de esta forma, será menor el monto del crédito que se deba solicitar Para pagar el precio de venta.